Así que hace dos días alquilé un coche, un flamante Ford Fusion muy chulo y con todas las teclas y botones imaginables (excepto el limpiaparabrisas de atrás, que nunca averigüé dónde estaba). Además el tiempo era maravilloso estos días: el día que cogí el coche sol a tope, el día siguiente sol a tope, el día que me iba... un tormentón de nieve del demonio (si es que...). Así que un poco acojonao pero animado por los de Banff, que decían que “eso no era na”, me embarqué en la aventura.
Así amaneció Banff el día que me iba, mecagon sus muelas.
El viaje, la verdad, fue especial, y no me arrepentí nada de haber cogido el coche a pesar del tiempo. Entre Banff y Jasper hay unos 300 Km que circulan entre unos paisajes preciosos: montañas enormes, valles gigantescos, ríos, lagos... Eso sí, con la nieve yo iba un poco mosca, porque al principio la carretera estaba bastante limpia pero a medida que avanzaba la carretera se iba haciendo más y más blanca hasta el punto de no distinguir la carretera del borde... pero vamos, que todo controlado, yo a una media de 50-60 Km/h y perfecto.
Estos puentes los construyen para que los bichos pasen por encima. De hecho si pasa un humano le cascan 2000 $ de multa.
La carretera no estaba tan mal al principio.
Pero, leñe, la cosa se complica.
Las cumbres de las montañas no se podían ver, caía una buena.
Navidad, Navidad, dulce Navidaaad...
Que me la pegooooo.
A pesar del tormentón, el viaje fue muy tranquilo. Daba gusto ver la inmensidad de los bosques, con tantos árboles, especialmente al pensar que no había NADIE en cientos de kilómetros a la redonda... daba qué pensar, fue genial. Incluso pude disfrutar de algunos paisajes muy chulos por el camino.
El lago Bow, congeladito el pobre.
Vistas de los enormes valles entre las montañas. Esto en verano tiene que ser un río espectacular, igualico que el Turia, vamos.
Gorilas en la niebla... o mejor osos.
En algunos momentos había que reducir bastante la velocidad, a 30 o 40 Km/h. Incluso había máquinas que quitaban la nieve.
En un momento dado, la nieve cedió un poco, justo cuando pasaba por las Athabasca Falls (cataratas Athabasca), así que me decidí a parar un ratito a visitarlas, menos mal porque ya pensaba que tendría que hacer el viaje del tirón, por si la nieve. Me quedé sorprendido de lo impresionantes que eran. No eran muy grandes pero hacían un salto entre las rocas de la montaña alucinantes. Daba gusto quedarse a mirar el agua cayendo en tromba a través de la roca. Al final, la catarata desembocaba en un lago, que es de lo más bonito que he visto en Canadá. El agua totalmente quieta, la nieve cayendo, el silencio absoluto, la tranquilidad total. Era un placer estar ahí y, de hecho, me costó bastante irme... una experiencia estupenda.
Junto a las cataratas había unos baños públicos totalmente a juego con el entorno... eso sí, estos baños no tienen cadena para tirar... todo va a un agujero enorme que hay en la tierra... es mejor no imaginarse como es eso por allá abajo.
Las cataratas Athabasca.
El agua caía salvaje del todo.
Esta foto parece un montaje de Photoshop pero nada de eso, real como la vida misma.
¡Agua va!
El agua, al tranquilizarse, adquiría un color azul precioso.
Llegada al lago que había después de la catarata.
La tranquilidad era infinita en este lugar, me quedaría horas aquí.
Para quedarse aquí en una cabañita, ¿a que sí?
Después de la excursión llegué a Jasper y a mi alojamiento. Como el coche me salió caro, elegí un Youth Hostel, que salía más barato y, la verdad, me salió la jugada redonda. Lo único malo es que está a 7 Km de Jasper, pero me sale la habitación a 21$ la noche (13 €). Y encima daban 3 noches por 2 así que me salió toda la estancia de 3 días por 42 $ (una noche en Banff me salía a 70$, la leche). Y además, el hostal no está mal, en la montañica, y aunque hay que compartir la habitación con 50 tíos más, el ambiente es bueno, hay sitios seguros para dejar las cosas, etc. Vamos que muy bien.
El hostal “Hi Jasper”, en medio de las montañas.
Y eso es todo por hoy, mañana excursión a los lagos.
Really beautiful photos, Jesús! You certainly are having an adventure! Congratulations on handling the snow driving -- I'm guessing that you don't do a lot of that in Spain. Things should warm back up when you get to Vancouver - they very rarely have snow there. ;)
ResponderEliminarCarolyn
El chato "pidoto, jeje, el pidoto soy yo!". Joe, nunca se me había ocurrido que Canadá fuese a ser un destino turístico que a mi me gustara, pero leñe, con tus fotos, que ganas me están entrando!. A ver si sale el curro y vamos a verte el año que viene!!!!!!
ResponderEliminarHola Jesús : Aqui seguimos tu blog y nos parece una idea excelente, ya que podemos disfrutar de tus fotos y tus comentarios.
ResponderEliminarNos alegramos mucho de que te lo estés pasando tan bien y del viaje tan espectacular que estás haciendo.
Aqui seguiremos leyendo esta cronica del viaje. Ojalá tambien den buen resultado las entrevistas y te podamos ir a visitar. Besos de todos nosotros
Hola Pîli, gracias por el comentario, que me gusta mucho leerlos. Ahora estoy en Vancouver y aún tengo pocas fotos para poner.
ResponderEliminarTuro, ¿a que mola? Pues a ver si os pasáis por acá.
Carolyn, we have snow in Spain, but I, personally, never drove with so much snow, so it was a nice adventure... and the bears didn't eat me!!
OYE Jesús,
ResponderEliminarque estamos echando en falta más contenidos, ¿qué pasa ... hay sequia????, yo cada vez que entro me lo repaso todo otra vez y ya llevo cinco días que no leo materal nuevo, ...
¡¡¡NOS TIENES ABANDONADOS !!! sin saber nada de ti, de las excursiones, de las costumbres del Oeste, sus diferencias con el Este, ... la Gente, las compañeras de Tren, de Autobus, .... de todo, los animales... los osos, los bambis....
También puede ser que ahora no te dejan horas de asueto, con tantas entrevistas, ...
Bueno, ... lo dicho, esperamos ansiosos tus documentales (mejor que el de la 2 de guias pivot
Un Beso fuerte. MUA.