jueves, 27 de mayo de 2010

23/05/2010: Bristol, el puente colgante de Clifton y alrededores

Bueno, como ya he visto bastante todo esto de Inglaterra y lo lleno que está de ingleses, hay que ver, he decidido abandonarlo todo e irme a la playita. Qué mejor que tomarse unas tapitas junto al mar, disfrutar de la música, el fresquito...



De tapeo.



Músicos espontáneos.



Las suecaaaas.



Disfritando del agüica.



Más suecaaaas.

Pero qué playa ni qué, todas estas fotos son ¡de Bristol! Sí, señor, de Bristol. Escondida habitualmente bajo un manto eterno de nubes grises, resulta que cuando sale el sol, Bristol es una ciudad preciosa y llena de vida. La gente toca música por las calles, se pone a tomar el sol, a pasear por el puerto, comer en restaurantes al aire libre... sorprendido quedome, amigo Sancho. Eso sí, debo decir que algunos ingleses, y especialmente inglesas, están para darles de comer aparte, la manía que tienen de tomar el sol sin protección con lo blancuchos que están. En más de una ocasión estuve tentado de bajarme de la bici y decirle a alguna "pero shiquilla, que te va a dar argo, mi arma". Al final no lo hice porque, a ver, ¿cómo se dice "mi arma" en inglés? ¿"my weapon"? no creo... aaaah, pues eso.

Ah, hablando de bicis, me he comprado una y la uso para ir todos los días al trabajo, una gozada, en 10 minutillos me planto en la ofi, preparado para hacer pelis. Aunque estoy lejos del centro, hoy decidí hacer una visita en bici a algunos de los sitios chulos de Bristol, y la verdad, ha sido una pasada. Eso sí, entre bajar al centro, la excursión y volver a casa, 30 y pico kilómetros de pedaleo, me voy a poner como un figurín.



Esta es la ruta que seguí una vez llegué al centro de Bristol: Queen's Park ("queen" se pronuncia como lo que decía Chiquito: "te da cuen"), el S.S. Great Britain, el puente colgante de Clifton y la catedral de Bristol.



Algunas de las muestras de arte callejero que me encontré bajando por Gloucester Road.



Unas preciosas casitas en fila, de estas hay muchas.

Mi primera parada fue la plaza de la Reina, o "Queen's Square". En Bristol hay unas cuantas plazas de este estilo, así con cesped y tal. Cuando hace sol la gente lo deja todo y se pone a echar la siesta (que luego digan de los españoles), tomar el sol e incluso hasta se traen la barbacoa y todo. Como acababa de llegar al centro con el calor y la pedaleada, decidí echarme un ratito bajo los árboles, un momento de esos "porque yo lo valgo", tranquilo, tranquilo.



Llegada a la plaza de la Queen... ¡fistro!



Mi bici y yo... bueno yo estoy sacando la foto.



Vistas desde mi posición destacada en la "operación siesta".

Siguiente parada, el S.S. Great Britain, un barco velero enorme, de los primeros en ser fabricados en hierro y con motor de vapor. En su día, allá por el 1843, fue el barco más grande del mundo. Curiosamente, después de dar vueltas por el mundo terminó donde se fabricó, en Bristol, donde ahora es un museo muy premiado.

El camino hacia el S.S. Great Britain discurre por el puerto de la ciudad, que con buen tiempo aparece saturado de gente tomando el sol, comiendo en restaurantes al aire libre o practicando piragüismo. Hay mucho ambientillo veraniego. Justo antes de llegar al barco hay unas vías antiguas de tren y unas máquinas antiguas que le dan un aspecto muy industrial a todo esto, pero con encanto. La verdad es que la sensación de tranquilidad y relax que hay en los días soleados le da a la ciudad un toque especial, nada parecido a "lo típico" de las ciudades inglesas... eso sí, estos días no abundan, quizá por eso se aprecien más...



Paseíto por el puerto.



La zona industrial del puerto, un sitio chulo para hacer fotos.



Cerca del puerto están las vías abandonadas de los trenes de carga.



Los antiguos trenes de la estación olvidada.



"Ya verás qué risa, cuando le cambie la vía a ese tren, me parto..."



El S.S. Great Britain, orgullo de la flota inglesa.



Curiosamente, al lado del S.S. Great Britain, está el otro edificio de Aardman, mi empresa.

Siguiendo por la orilla del río, en bicicleta o andando, llegas a la parte final del puerto, que da acceso a una zona de parques enormes, verdes y llenos de árboles. Un sitio perfecto para perderse una tarde soleada o hacer el típico picnic con mantel de cuadros, tortilla de patatas, ensaladita, filetes empanados y la bota de vino... no saben lo que se pierden los ingleses.



El puerto de Bristol es muy activo, hay barcos en reparación y todo.



Saliendo del puerto se empieza a ver las colinas verdes.



El parque de Greville Smyth, ya camino del puente colgante de Clifton.

Siguiendo por los caminos que bordean el río, llegas al Clifton Suspension Bridge, o puente colgante de Clifton, un puente enooooorme, que es uno de los símbolos de la ciudad. El puente puede verse desde muchos sitios de la ciudad, ya que está en lo alto y, como dije... es muy grande. El puente, diseñado por el arquitecto Brunel en 1800 y pico, pasa sobre el río Avon a lo largo de 214 metros y a una altura de 75 metros. También es uno de los típicos sitios donde uno se suicida en Bristol. Así que si pasáis por Bristol y os apetece suicidaros, ¡ya sabéis desde dónde podéis dar un saltito!



El caminito que lleva a la base del puente.



El puente se ve desde muchos sitios de la ciudad.



La verdad es que es un buen castañazo si te tiras desde arriba... sobre todo si caes en plancha... qué dolor.

A mi vuelta del puente colgante de Clifton, me encontré, un poco por casualidad, con la Catedral de Bristol. Lo malo es que ya iba de vuelta y no me dio tiempo a parar para verla por dentro, pero ya haré otro reportaje. La Catedral data del siglo XII, en estilo gótico y tiene un rosetón central que, por lo visto, no es muy habitual en Inglaterra. Dicen que tiene una fachada más bien española que inglesa y que tiene aires a la Catedral de Burgos (aunque la nuestra es mejor, seguro). Cerca de la Catedral está la Librería Central de Bristol, con un parque donde, como no, la gente estaba tomando el sol como lagartos.



La estupenda catedral de Bristol, más información en proxímos documentales.



La Biblioteca, con los lagartos al sol.



Parejita disfrutando del solete.

Y para terminar, y de esto ya hablaré en otra ocasión, en el centro ¡hay un montón de tiendecitas y centros comerciales! (esto va, sobre todo para las chicas, claro).



Centro comercial de Cabot Circus.

Y eso es todo, de momento, otro día más.

domingo, 16 de mayo de 2010

16/05/2010: Bristol, mi primera semana "Chispas"

Domingo. La semana de "las primeras veces". Acabo de terminar mi primera semana laboral en Bristol. La primera semana de curro en Aardman y de vivir, en general, en otra ciudad, a más señas, inglesa. La valoración en conjunto es muy buena, la verdad. El trabajo es apasionante, hay veces que estoy trabajando en un plano, medio obcecado porque algo no sale, pero entonces me levanto y digo "oye, que esto va a salir en una película supertaquillera" y me entra el subidón, jeje.



Aztec West, el recinto donde se encuentra mi empresa. Parece que he puesto las letras en "Potochó" pero no, son así, en serio.

Lástima que no pueda poner fotos de dentro (está restringido) pero sí puedo poner algunas cosas que hay en recepción, como luego enseñaré. El lunes entramos 3 nuevos: yo, Robert (alias Jacko) y Rupert, ambos doses parecen buena gente y son muy majos. Robert viene del mundo de la televisión (trabajó en Sky TV) y Rupert trabajó en Framestore (una de las grandes de efectos visuales), los dos de Londres. De hecho no es el primer compañero que viene de esa empresa, parece que el ambiente allí era de mucho estrés. El resto del equipo es muy majo y te apoya mucho. Yo pregunto bastantes cosas pero siempre me responden con una sonrisa.

En cuanto a vestimenta yo voy "apañaete" pero los demás van como quieren. Hay algunos que van con chanclas y todo (están locos estos ingleses). En mi trabajo también tuve mi primer "dailies", que es como presentaciones del trabajo que has hecho hasta ese momento. Ahí conocí a Lindsay, el jefe de los efectos, y me dijo que muy bien que todo muy bueno y muy limpio. También tuve momebntos de tensión cuando vi que me costaba solucionar un plano, hasta que mi compañero me dijo que no me preocupara que ellos llevaban con cosas parecidas un par de meses (y yo llevo una semana). Es que es el ansia que me corroe, la verdad es que me tranquilizó bastante.



El gallo de "Chicken Run". Se ve el esqueleto interno que llevan estos bichos.



Wallace & Gromit (el perro), los personajes estrella de la empresa.



Una de las gallinas de "Chicken Run".



El gallo de antes "encajonao", que no "acojonao". Anda, ¡el del reflejo soy yo!



Una vitrina con personajes de varias pelis.

Otra cosa nueva que he hecho es comer en la cantina (esto parece México) y no se come mal... tampoco es la pera, pero es barato. Con los compañeros ya he salido a comer un par de veces fuera y ayer fuimos unos cuantos compis a ver "Iron Man 2"... pues eso, de superhéroes. Lo bueno es que voy haciendo más amistad con la gente de acá, eso viene muy bien.

Más cosas nuevas: ah, ya tengo mi cuenta bancaria inglesa, así que ya soy un poco más inglés. Eso sí, la banca por internese no me funciona, le meto la clave y na, habrá que volver al banco.

En mi casa ya he hecho el recuento de gente y creo que ya están todos, pero es que aquí como son todos tan sigilosos, pues a veces me encuentro con gente nueva y es que resulta que trabajaban o lo que fuera. El recuento es: yo mismo, Linda (la casera o "landlord"), Karen (una chica muy maja que trabaja de noche y le gustan las pelis de miedo), Martin (el típico inglés que pasa un poco de todo... el sieso, vamos), Claire (otra siesa), Matt (un chico alto que descubrí el otro día) y una pareja que he visto dos veces y que no tengo claro como se llaman.

Aquí también he tenido ya algunas de esas "primeras veces", por ejemplo:



Mi primera colada "chispas".



Mi primera bajada al centro desde mi casa, con el autobús 73. Tarda una hora en llegar al centro pero para enfrente de casa y sale cada 15 minutos así que bien.



"¿Has visto el Blog del chato?".
"No, ni pienso".



Mi primer desayuno "a la inglesa": huevos, bacon, queso, cereales y zumo.



Mi primer desayuno en el jardincico. Hay que aprovechar cuando hace bueno, que luego "ni flowers".

Y para que veais que no como guarreridas, os presento los deliciosos "majaderini carbonara" que me preparé ayer para comer. Y no son de bote, oiga.



Majaderini Carbonara Grand' Italia.

Y a la pregunta clave de si he conocido a mi primera sueca... pues no, parece que se esconden las jodías, pero... seguiremos informando... yo tengo fe en las premisas de Alfredo Landa y José Luis López Vázquez.



José Luis López Vázquez y las suecas.

Y para que conste que no hablo por hablar, y que estoy muy informado y documentado os paso el vídeo en el que baso mi estilo de vida y principios morales:

domingo, 9 de mayo de 2010

04/05/2010: Back to Bristol!

Las vueltas que da la vida (iba a decir "la visa", que también, también). Quién me iba a decir a mí que mi último viaje para visitar a los hijos de la Gran Bretaña iba a resultar en una oportunidad de empleo como especialista de efectos visuales, ni más ni menos que en Aardman, una de las mejores empresas de animación del mundo, creadores de películas como "Chicken Run", "Wallace & Gromit" y muchas más.



Algunas de las pelis que ha hecho Aardman, han ganado Oscars y todo.



Mi contrato firmadico y selladico.

La cosa es que en el viaje a Londres fui a una "masterclass", que es como una especie de conferencia, sobre técnicas de cine 3D (aquí hay alguna foto) y allí estaba la gente de Aardman, diciendo que buscaban a gente. Así que nada, intercambio de tarjetitas, email, llamada para hacer entrevista y trabajo al canto, ole, ole.

Empiezo el 10 de mayo (mañana, según escribo esto, qué emoción) así que el día 4 conseguí un vuelo a Bristol directo desde Valencia para iniciar los preparativos, buscar casita, etc. Todo eso, por supuesto, si nuestro querido volcán me deja, claro. Encontré casas de todo tipo, desde la típica casa cochambre de estudiantes con calcetines usados tirados por el suelo (muy majos ellos... pero hasta yo, que soy un desastre, pensé "ese calcetín ¿es decoración o lleva ahí días? ¿meses?" La cosa es que creo que se movía un poco), hasta la típica casa inglesa cuidadita y tal. Al final, aunque me resultaba bastante más caro, elegí la casa chula. Es una casa compartida con más gente, pero muy independiente, la habitación es espaciosa y tiene baño propio, ole, ole.



Con Collin, el dueño del "Willow Lodge Hotel", donde me hospedé hasta conseguir casa. El hotel es normalito pero el ambiente es muy familiar, muy recomendable.



Los alrededores de la casa, "bucolico, bucolico, como el tío Federico".



La cocina imperial.



Salón con piano, igual en las tardes sombrías, me pongo a tocar algo.



Salón grandote.



Jardín con barbacoa, lo usaremos cuando salga el sol... si sale.





Mi habitación con cama grandota y romántica. Lo negro que cuelga de la esquina es mi sombrero.



La mesa para el ordenador y al fondo el baño, es pequeño pero para mí solo, nada de colas por las mañanas. Ah, y entre la habitación y el baño, el sueño de toda mujer... ¡un mini-vestidor!

Los compañeros de piso son variaditos, aunque aquí la gente, la verdad, es que pasa bastante de todo el mundo y va a su aire. Tengo a una chica mayor que yo que trabaja en temas de sanidad, una chica morenita, que parece la más divertida, un tío más rancio que el demonio y una pareja joven (ella parece suecaaaa), aparte de la dueña que también vive aquí. Así que una gran familia de lo más variopinto, con los que he cruzado apenas un par de palabras, jeje. Bueno, todo se andará.

El otro día fui a visitar la empresa y dio muy buena sensación, parecía que había muy buen ambiente y el sitio es muy grande. Hasta incluso vi mi mesa a través de una ventana (de aquí no tengo fotos porque hay que firmar cláusulas de confidencialidad muuuy estrictas). En recepción estaba Ann, una mujer muy simpática y luego me enseñó la empresa Amy, la VFX assistant, una chica muy maja que venía de trabajar de Framestore (otra de las "grandes" de los efectos), en Londres, y decía que esto era mucho mejor.

El entorno del estudio, desde luego, es de fábula, con laguitos, cascadas, fuentes... ideal para relajarse un poco de vez en cuando. Además, tengo la casa al lado, así que "perfect!".



El estudio visto por fuera, por dentro no puedo que me echan antes de empezar.



La entrada a Aardman.



Los alrededores son muy chulos.



Con lagos y todo... así es como Heidi pensaba que sería su oficina cuando era pequeña.

Seguiremos informando...